Los consumidores, los clientes, no recuerdan quien les vende, ni la persona, ni la empresa, lo que ellos recuerdan e identifican como un producto o servicio de calidad, es LA MARCA; ése nombre y ése logo que gravan en su mente, en su corazón y que muchos lo hacen su favorito y otros incluso llegan a amar, es TU MARCA, y no es posible que todo lo que un equipo de trabajo construye durante años con tanto empeño, esté en riesgo de que en cualquier momento, alguien la copie para hacerse pasar por tu marca o peor aún que alguien la resgistre antes y legalmente esté facultado para prohibirte que la uses y quedarse con todo. Sin duda, nada más importante que REGISTRAR LA MARCA.
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